¡Contraponer “el antes” de esta reforma con el resultado final no ha sido tarea fácil! El cambio fue tan espectacular y la distribución se modificó de una forma tan radical que los espacios son casi irreconocibles…
Hace unos meses llegó a nuestras manos este viejo y deteriorado apartamento que requería un cambio drástico para dar lugar a un nuevo hogar de estilo industrial, cálido y con mucho carácter. Vale, lo admitimos: cuesta de creer que sea el mismo… ¡pero prometemos que lo es! 🙂
Esta es una visión general, desde la entrada, del espacio diáfano que engloba comedor, cocina y salón y que antes estaba subdividido en diferentes estancias:
Antes y Después: Reforma integral de un viejo apartamento
Resultado final de cocina-comedor-salón después de la reforma
Desde el mismo punto de donde se tomó la fotografía anterior, tomamos la siguiente imagen antes de iniciar la reforma:
Vista antes de la reforma.
Como veis el espacio estaba totalmente dividido por tabiques. Durante la reforma se eliminaron absolutamente todas las barreras espaciales y se redistribuyó el espacio por completo. Además, como veis, se recuperaron las vigas de madera y el ladrillo de la pared haciendo un importante trabajo de restauración estructural. Además, el suelo se cubrió con un pavimento continuo que sólo se interrumpe en la nueva cocina donde optamos por un reservado de mosaico en blanco y negro.
Desde la zona donde se ubicó el nuevo salón (entrando a la derecha) se accedía a la cocina original que con la reforma fue sustituida por un dormitorio.
Antes y después de la zona del salón.
Vista del salón después de la reforma.
Y donde había la antigua cocina ubicamos una de las habitaciones:
Antes cocina, después dormitorio.
Vista del estado final del dormitorio que se construyó donde antes había la cocina y en el que se le incorporó un baño al que antes se accedía sólo desde la terraza.
Antes y Después del baño que se incorporó a la habitación.
Vista del baño después de la reforma.
Una segunda habitación se proyectó ocupando un espacio antes también subdividido (ubicado a la parte izquierda del pasillo que te encontrabas al entrar). En ella se incorporó baño, aseo y ducha a la vista y se separó de la nueva zona de la cocina con una vidriera de estructura metálica.
Antes y después del segundo dormitorio.
Vista del segundo dormitorio después de la reforma.
Antes y después del segundo dormitorio donde se ve la división de vidriera.
Vista del resultado final del segundo dormitorio con baño, aseo y ducha a la vista.
